lunes, 28 de mayo de 2012




ASYLUM 
(1972)

Peter Robinson








 Tus sueños se funden con el sol,
tus sueños se funden con el sol,
tus sueños se funden con el sol

¿Estás fuera o estás dentro? ¿qué es estar fuera? ¿qué es estar dentro? La mente es ese lugar que no conocemos, que no podemos descifrar pero que se rebela cuando la realidad llega a un límite de irrealidad. A las mentes rebeladas se las medica para adormecerlas, para que paren de gritar las verdades que nadie quiere oír para imaginar todas las pesadillas que nadie cuenta, para inventar todas las vidas que no existen.


(el precio de saber quién eres cuesta un infierno)




En una pequeña casa de Inglaterra, existe una comuna de enfermos mentales que intentan sobrevivir unidos, alejados de las familias y los trabajos y los tratamientos médicos. Todos, recluidos en sus espacios internos, intentan buscar una solución para vivir juntos.



They are playing a game. They are playing at not
playing a game. If I show them I see they are, I
shall break the rules and they will punish me.
I must play their game, of not seeing I see the game.

They are not having fun.
I can’t have fun if they don’t.
If I get them to have fun, then I can have fun with them.
Getting them to have fun, is not fun. It is hard work.
I might get fun out of finding out why they’re not.
I’m not supposed to get fun out of working out why
they’re not.
But there is even some fun in pretending to them I’m not
having fun finding out why they ’re not.

(Knots, R.D. Laing)












domingo, 20 de mayo de 2012




FILM SOCIALISM
E LA NAVE VA
(1983-2010)

godard / fellini

            


el hombre vuelve a la geometría, 
al origen de las cosas


¿qué te gustaría meter en un barco? Loros, agua, olas, canciones, aventuras, amor. Finalmente sólo parece quedar el amor a los amigos y una historia imposible, vivida como si fuera la realidad, acumulando animales con el corazón en la boca, ¿qué representamos en medio del mar, en medio de ese desierto mojado que nos habla de nosotros mismos para siempre?
Las cosas no se acaban nunca y aparecen para hablarnos del pasado y del futuro, o sea, del presente y decirnos la verdad sobre lo que quedaba oculto, envenenado por el dinero, el viento, el mar; pero nunca podremos entender la verdad, no estamos preparados para eso. ¿Entonces para qué estamos aquí? Viajemos, amigo, viajemos.
El dinero fue inventado para que la gente no tuviese que mirarse a los ojos y lo estuviera contando continuamente, y por eso, lo más hermoso está fuera, mucho más allá de la materia, aunque nos hagan creer que en ésta reside el paraíso, y por eso debemos salir fuera para ver a los que no tienen nada, para ver cómo bailan despojados de poder, el poder que no deja dormir a aquellos que se quedan en tierra.
Hay que imaginar un desierto y amar al silencio e intentar ver las cosas a diferentes velocidades, a un ritmo nuevo, con formas hermosas de las que enamorarse, pues si el movimiento es importante, es porque pone en marcha un conocimiento, un saber nuevo, más humano, más arena, más polvo como todos nosotros, más desaparición bella y necesaria para que todo se alimente de todo y las olas sigan pasando y podamos memorizar frases como la vida es bella a pesar de todo, pues las ideas tampoco están hechas para el hombre pues nos hacen creer que no somos igual que un loro, un gato, un burro, una llama, un rinoceronte y nos hacen creer que no tenemos valor para pensar y dejamos de transformar la realidad quedándonos con su parte más pobre, más cutre; escuchad a las olas: las ideas os separan, los sueños os acercan aunque apenas nos podamos ver, ya que la luz se ha ido muy lejos y trabajamos en la oscuridad como murciélagos, haciendo lo que se puede, buscando sangre, pensando:
también atacaré al sol si él lo hace y cosas así, cosas que viajan en un barco lleno de piedras preciosas y animales infernales, de corazones en la boca y voces interiores que nos pertenecen; todo dentro de un barco invadido de sonrisas y absurdos, de comidas, sexo, dioses, mentiras, podredumbre y miseria, de tesoros y vida y cuentos y gente que vive y gente que cuenta, teniendo que elegir, intentando resolver el X + 3 = 1 despojándonos de cualquier poder absoluto (llámalo como quieras), intentando ser una sociedad, no un Estado, no un  poder, sino un sueño doble en el que podemos ser el que vive y el que cuenta, de forma simultánea y finalmente, llevarnos el rinoceronte a casa.





un barco de largo trayecto,
¿quién es el siguiente?





KILLER OF SHEEP 
(1979)

Charles Burnett





A veces la libertad sólo se encuentra entre los escombros y concretamente, en los lugares más abandonados y diminutos, tan invisibles, tan polvo, tan jauría como los átomos; átomos rodeados de basura jugando a ser espíritus.
Las canciones se llenan de cosas verdaderas cuando las canta la soledad intentando sentirse bella, aunque sólo sea una tarde, para ir a bailar; al cantar, las almas se llenan de lo que nadie puede hablar, pero ocurre otra cosa, en estos lugares tan pequeños, tan sin nadie, tan olvidados y es que los paraísos se quedan muy lejos, tanto que sólo parecen quedar los cuerpos de carne y hueso como si fuesen la nada y ni siquiera acariciarlos parece llamar la atención del consuelo.
Sólo las canciones salvan del infierno, porque el silencio de los humildes es el ruido más aterrador, la tormenta más salvaje, sólo las palabras calladas son las cicatrices eternas y son el momento en que los rostros hablan y dejan a un lado todo lo demás, a pesar de que todo lo demás simplemente sea degollar cuellos para no ganarse la vida.




This bitter earth

Well, what fruit it bears
What good is love
Mmmm that no one shares
And if my life is like the dust
Oooh that hides the glow of a rose
What good am I
Heaven only knows

Lord, this bitter earth
Yes, can be so cold
Today you're young
Too soon, you're old
But while a voice within me cries
I'm sure someone may answer my callAnd this bitter earth

Ooooo may not


Oh be so bitter after all







DISTANT VOICES, STILL LIFES
(1988)

Terence Davis


                                                     



Si miras un espejo después de media noche, verás al demonio. Existen creencias, existen formas de vivir a través de la fe en las cosas, en las personas, en los espíritus y a veces esos espíritus cantan canciones del pasado para aliviar el futuro. ¿Quién puede soportar la vida cuándo las ventanas están cerradas? ¿quién puede sonreír cuando ha visto el mal y ese mal tiene la cara de su padre? Entonces cantaremos y cantaremos hasta el fin para que ese terror no nos coja dormidos y beberemos sin pensar, aunque no queramos, para que el porvenir no nos encuentre sobrios del todo y luego fumaremos todo lo que podamos antes de entrar, recordando la letra de la canción de mañana.
Mamá canta una canción en la cocina, eso es algo que perdura, que vuelve como el día.
Sólo en las canciones sobreviven los recuerdos felices o al menos, los recuerdos que no dañan cuando por ser algo, éramos otros y todo era enorme; el mundo debió ser bello, pero ahora, un extraño efecto nos dice que eso nunca ocurrió, nunca nada fue tan feliz como lo recordamos. Terence davis sabe que las canciones eliminan el mal del pasado y que se superponen a la oscuridad de las habitaciones, a los días en silencio, rompiendo los espejos para que no estemos tristes; su cine es un espejo del espacio donde nace el tiempo en toda su amplitud. Davis inventa el espacio como un escenario temporal lleno de grietas por las cuáles se cuelan momentos a los que llamamos memoria, por no llamarlos laberinto. Terence Davis es un director proustiano, afanado en construir un enorme lugar donde todo acontece sin un tiempo preciso, utilizando esa función simultánea del cine tan especial, dilatando las imágenes para romper la linealidad de la vida y de la mente; su cine es fantasmagórico e intrincado, repleto de apariciones y sonidos que van ordenándose para acabar dibujando una existencia concreta. 

Si miras un espejo después de media noche, verás al demonio. Se puede creer en muchas cosas, pero sólo se puede sobrevivir de una: escapando de lo que nos hace daño. Existe algo en la sociedad que se llama familia, venerada por las instituciones y la moral, alabada como la forma estable de supervivencia social, pero, ¿qué protege verdaderamente una familia? ¿la libertad? ¿el amor? ¿la fe? ¿el egoísmo? ¿el demonio? ¿cómo ser libres dentro de una familia? ¿cómo sobrevivir después de mirar un espejo, pasada ya la media noche? ¿Cómo huir si nos intentan enseñar que es imposible? Terence Davis nos muestra una familia como tantas otras, llenas de contradicciones y falsos movimientos. Todos los malos hábitos se juntan con las buenas formas y las apariencias. Davis sabe lo que ocurre y crea una imagen que todos guardamos en secreto; la íntima repugnancia de lo íntimo. 
Andando por la calle, aún puedo oír esas canciones; cantad, cantad, cantad hasta el final, pero los malos secretos de las familias, seguirán ocultos en la oscuridad, hasta que las canciones dejen de cantar mentiras que nunca existieron. 





domingo, 6 de mayo de 2012




SALESMAN 
(1968)

Maysles brothers




 ¿Qué es lo que quieres de mí? ¿qué es lo que pretendes?
 Quiero ser un hombre rico en esta tierra de mierda



Para comenzar, os presentaré: ellos son The Bull, The Gipper, The Rabbit y The Badger, cuatro hombres que saben que no hay nada como la mentira en este mundo, nada tan sugestivo como ella, tan alimenticio, tan supremo, tan básico. Existen modos supervivencia que canalizan este estado del deseo natural y transforman la ficción en un elemento indispensable. Crear esa mentira es una cosa, ser esa mentira es otra. Esta es, sin duda, la diferencia sustancial que separa a las películas de los personajes reales que aparecen en los trabajos de los hermanos Maysles; seres desconectados de la realidad que cantan canciones del pasado, viviendo existencias imposibles, pero finalmente reales, llenas de mentira, una mentira que les ha dominado y que gasta sus días, transformando la tristeza en un oficio.
¿Cuál es la historia más vieja y más conocida del mundo? Seguramente la nuestra, la de te voy a decir lo que necesitas para sobrevivir, pero tendrás que darme algo a cambio. Siempre hay una trampa cuando existe un interés, siempre hay un engaño cuando alguien te vende algo, aunque sea el mismísimo reino de los cielos cayéndose a cachos.Los hermanos Maysles volvieron a Boston para ver a sus antiguos amigos, para filmar cómo vivían muchos años después de conocerlos y les encontraron a todos vendiendo Biblias o lo que es lo mismo, practicando el trabajo más viejo de la Historia: el engaño. 
Todos los rostros que aparecen, son rostros de hombres que han pactado con el diablo más allá de sus intenciones, de sus almas, de su suerte. Todos sus recorridos son trayectos por un infierno muy real, un infierno de casas con jardín a plazos, donde los clientes saben sin duda que van a ser engañados y aún así, son convencidos de que el bien está escrito en unas cuantas hojas que otros escribieron. Los Salesmen hablan a los pobres más pobres y a los inocentes más inocentes, de gastar sus últimos dólares en la necesidad básica de comprar una vieja historia empapelada en oro que nunca van a leer. Los rostros de los Salesmen, son las historias que no nos cuentan en la película, son las palabras que no nos quieren decir porque no pueden, porque este es su lado oscuro, porque ahora son los vendedores del mal, algo así como los jinetes del apocalipsis venidos a menos, habitando una época en la que, en vez de caballos, viajan en cadillacs. Los Salesmen poseen vidas ocultas a sus espaldas, trabajan con nombres inventados que hablan de sus cualidades en cuanto a la mentira, personajes de fábula recorriendo los barrios de la Tierra, con caras de personas corrientes, muy corrientes, que esconden un secreto del que no hablan hasta la noche, cuando se juntan y recuerdan cómo han intentado vender la historia una vez más, un día más.
Muy lejos de las nubes, donde las cosas se mueren, caminan estos jinetes con sus maletas, vendiendo su destino en cada puerta, lejos de sus sueños, lejos de otra vida, la vida de los hombres. Viven en silencio y por las noches se juntan a jugar a póker con el poco dinero de los inocentes, es su trabajo: llamar a las puertas y engañar a cualquiera en el nombre de la eternidad, portando unos rostros que hablan del mal, si verdaderamente el mal existe. Cada día cuentan sus fichas y entre ellas puede estar la tuya y llamarán pronto a tu casa para venderte una cosa, algo así como la historia más vieja y más contada del mundo.